Nuestro equipo de científicos, desde 1991, se ha centrado en investigar los efectos que provocan las sustancias y el medio ambiente sobre los genes (genotoxicología). Este fue el punto de partida para incorporar nuevos avances y descubrimientos científicos, incluidos los aportados por el proyecto genoma humano hasta marzo de 2022, para desarrollar herramientas “inteligentes” que correlacionen el polimorfismo genético, particular de cada persona, con la selección adecuada de alimentos, nutrientes esenciales y algunos compuestos naturales que se interconectan con el epigenoma, particular de cada individuo, para modular los genes alterados como única forma de prevenir, controlar, tratar o revertir enfermedades, síndromes, trastornos y retrasar o revertir el proceso de envejecimiento y aumentar el bienestar físico e intelectual. capacidades de cada persona en particular hasta extender la calidad de vida a límites imprevistos.